Maury
Wills primer jugador del Siglo XX en estafar más de 100 almohadillas en una temporada de
Grandes Ligas.
El campo-corto de los
Dodgers de Los Ángeles, Maury Wills, estableció en la campaña de 1962 el récord
de 104 robos de base, en las Grandes Ligas.
Fue el primer pelotero en el béisbol moderno en
estafar 100 o más bases, en una temporada en las Mayores. Rompió el récord
establecido por Ty Cobb, de 96 robos. En 14 años en las Mayores, Wills estafó
un total de 586 bases. Maury Wills era un estudioso de esta especialidad y
escribió un libro titulado “Stealing is My Game”. Usaba la rapidez de sus
piernas, tomaba terreno con una gran distancia desde la almohadilla y tenía una
alta concentración sobre los movimientos de los pitcherts. Esta situación,
generaba una presión psicológica en la defensa de cualquier equipo contrario.
Los
Reyes del Robo de base en su época, el venezolano Luis Aparicio y Maury Wills,
conversan muy sonreídos.
El campo-corto venezolano
Luis Aparicio Montiel, había resucitado en las Grandes Ligas el arte de robar
almohadillas. Tuvo 9 temporadas consecutivas siendo el líder estafador de bases
de la Liga Americana (1956-1964). En sus 18 años de carrera, tuvo un total de
506 robos.
Lou
Brock, quien estableció su marca de 118 robos en 1974.
El joven Lou Brock, de los
Cardenales de San Luis, tomó lecciones de cómo correr las bases, de parte de la
leyenda de las Ligas Negras, Cool Papa Bell. También aprendió de Maury Wills la
forma exitosa de robar las bases. Brock lideró en 8 de 9 temporadas (1966-1974)
el departamento de estafas. En 1974, Lou Brock estableció el récord de robos en
las Mayores, con 118 estafas, en una zafra, a la edad de 35 años. Brock pasó a
Billy Hamilton, quien tenía 914 robos de por vida y dejó su marca en 938 robos.
Rickey
Henderson, máximo robador de bases en la historia de las Mayores.
Rickey Henderson, con los
Atléticos de Oakland, al mando del Manager Billy Martin, quien le enseñó como
agacharse en el plato, para minimizar su zona de strike y le transmitió todos
sus conocimientos para que Rickey Henderson fuera el mejor primer bate en la
historia de las Grandes Ligas. En su primer año con los Yanquis de Nueva York,
Henderson anotó más carreras que juegos jugados (146 carrera anotadas, en 143
partidos, el año 1985). El último pelotero que lo había realizado, era Jimmy
Foxx en el año 1939 (130 carreras anotadas, en 124 partidos).
Rickey Henderson,
a la edad de 23 años, estableció el récord actual del béisbol moderno, de 130
robos de base en 1 temporada, el año 1982. Hugh Nicol en el año 1887, se estafó
138 bases en 1 temporada y es el líder en la historia del béisbol.
También, Rickey Henderson tiene el récord de más robos en la carrera de 1 jugador de Grandes Ligas,
con 1.406 estafas, en 25 campañas.
De los venezolanos, más
robadores de base en 1 temporada en el Big-Show (con más de 50 bases estafadas),
tenemos a: Roger Cedeño, con 66 (1999), Luis Aparicio, con 57 (1964), José
Altuve, con 56 (2014), Luis Aparicio, con 56 (1959), Luis Aparicio, con 53
(1961), Luis Aparicio, con 51 (1960).
Los peloteros criollos con
más bases robadas de por vida en las Mayores son: Luis Aparicio, con 506; Omar
Vizquel, con 404; Bob Abreu, con 400 y David Concepción, con 321.
Luis
Aparicio, el venezolano con más robos de base de por vida, con 506.
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