Entrevista a Carlos Maal en 1930

La célebre batería del "Royal Criollos" en 1927, el pitcher Luis Manuel Giannotti y el receptor Carlos "Catire" Maal. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

A continuación, comparto con los amables lectores, una interesante entrevista realizada al célebre catcher del "Royal Criollos", Carlos "Catire" Maal, a finales de 1930 y publicada en los primeros días del año 1931, en el periódico "El Nuevo Diario", a quien fuera un ícono del equipo y gran pelotero venezolano en una época dorada y romántica de nuestro béisbol, espero la disfruten:

Charlando de Béisbol con Carlos Maal

La Tribu criolla del "Royal" y sus actuaciones en el año pasado

La liga de las simpatías locales continúa en excelente forma. Sus brillantes y sonoros triunfos después del torneo campeonil. El "Royal Criollos" ofrecerá, según su receptor gran resistencia en la serie de este año.

En el "Bar Royal", la moderna peña de los peloteros criollos, encontramos a Carlos Maal, el rubio receptor realista, fervoroso apasionado de sus colores y uno de nuestros más destacados sportmen. Inmediatamente pensamos en extraerle algunas declaraciones sobre la liga realista, la novena de que mayores comentarios se han hecho y que disfruta de generales simpatías. El propósito no era tan fácil de realizar. El catire Maal tiene escasas sonrisas, abundantes frases y… pocas palabras. Pero, con voluntad entramos en acción.

Terminando el año, ¿qué opina usted de las actuaciones de su novena en la Serie Nacional de 1930?

Siempre me he sentido satisfecho, y ahora con mayores razones, de la labor en conjunto de la novena del "Royal" y de las actuaciones individuales de mis compañeros de liga. En la pasada serie hicimos cuanto estuvo a nuestro alcance, buscando con tesón y voluntad el deseado título, que los "bucaneros de Catia" ganaron por mera casualidad. Opusimos a la invasión boricua que vino a reforzar las ligas contrarias, nuestras magníficas condiciones y la potencia de nuestro ataque y nos queda la satisfacción de que, aunque no exhibimos un título, nuestra novena fue principal protagonista de los mejores y más sensacionales juegos de la Serie, llenos de pimienta y candela. Algunos detalles de especial importancia, que usted y los fanáticos conocen de sobra y no creo oportuno recordar, interrumpieron y cortaron, en los principales y más valiosos momentos, nuestra marcha acelerada hacia la victoria campeonil. Nuestra liga se hallaba en estupenda forma en los últimos meses de la lucha, pero ya resultaba imposible reparar los daños que se nos habían ocasionado.

¿Cómo se encuentra el "Royal Criollos" después de la Serie?

Finalizado el campeonato de 1930 nuestra liga se ha convertido en una devastadora máquina beisbolera que ha barrido todo lo que se ha opuesto en los diamantes locales, con excepción, naturalmente, del poderosísimo tanque de guerra que nos trajo Tony Luciano. El "Macon" tenía que resultar demasiado fuerte para nosotros. La diferencia que se establece entre el profesional y el principiante, aunque a éste le sobren entusiasmos y coraje. Sin embargo, el conjunto beisbolero de Georgia, nos dio sabias y provechosas enseñanzas que contribuyeron al aumento de nuestros conocimientos beisboleros. Poseen los "melocotones" un alto concepto del team work y hacen derroche del necesario e importante sportmanship.

El famoso shortstop samario Moors al bate y el catcher realista Carlos Maal. (Foto: M. Gómez). Año 1927. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Fue nuestro Club el único de los centros locales que pudo obtener una victoria sobre los aguerridos peloteros del "Ponce", la novena de los "Leones del Sur", que machineaba la figura interesante de Agustín "Tingo" Daviú, y en la cual militaba el notable fielder boricua Emilio Navarro Millito. El "Ponce" destrozó a los campeones del "Magallanes" y a los sub-campeones del "Cincinnati", dando una norma de velocidad formidable pero, al salir a la palestra frente al "Royal", se encontraron con el terrible lanzador venezolano Balbino Inojosa en el pitching box y sus bateadores, que habían resultado la pesadilla de serpentineros de otras novenas, fueron debidamente dominados en los primeros innings, para terminar completamente agotados. Balbino pitcheó esa mañana con toda la maestría que le ha dado fama.

En cuanto al "Magallanes", vencedores en la Serie de 1930, les ganamos un fenomenal evento después de ocho días de haber obtenido el trapo, superándolos ampliamente en todas las posiciones. El partido, organizado por la "Junta Amigos de Pako Betancourt", con fines altruistas y generosos resultó un éxito completo en materia deportiva y financiera. Todos los premios ofrecidos por el Comercio y particulares fueron ganados por los players realistas, algunos pasaron a poder del "Magallanes", por benevolencia del Jurado a quien se encomendó su distribución. La liga campeona reforzó su line-up con cuatro jugadores extranjeros.

El receptor Carlos Maal y el pitcher Carlos López, del equipo "Royal Criollos". Año 1927. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Luego, en la serie de cinco juegos por el bello trofeo Copa "Lemmo", empatamos el primer partido y ganamos el segundo y tercero. Con dos derrotas entre el buche, y sin esperanzas de ninguna victoria, bastante hicieron con perder en el noveno inning del cuarto y último juego, al no aceptarles el Chief-Umpire una absurda reclamación sobre la fantástica violación de una regla.

¿Cuáles son los actuales proyectos del "Royal Criollos"?

Estamos en un descanso necesario, indispensable. A principios del entrante mes de febrero volveremos a los campos de práctica, en los terrenos del Este, de tan gratos y gloriosos recuerdos deportivos. Esos diamantes nos vieron surgir y fueron teatro de grandes hazañas de nuestro abuelo el "Independencia" y de nuestras novenas. Allí hemos obtenido scores que ese Diario ha calificado de páginas brillantes de nuestro historial deportivo. Al abrirse el Campeonato, siguiendo las instrucciones de nuestro recordado y querido Capitán, "volveremos a la lucha, con el mismo interés y entusiasmo de costumbre y el mismo conjunto netamente criollo". Y esta vez, si la suerte no nos abandona, ganaremos el trapo.

Aunque no haremos, por ahora, ningún cambio en la novena, nos acompañarán a los campos de práctica unos cuantos novatos a los que daremos chance de demostrar sus condiciones y realizar buenas proezas en una liga mayor. En esta forma entraremos en la contienda de 1931 con los mismos hombres que formaron el team el año pasado, siendo las reservas muchachos nuevos y alguno que otro veterano que adquiramos en estos días. El team, con aspiraciones al primer puesto, luchará duro desde temprano a fin de alejarse lo mayormente posible del sótano. Nada entorpecerá la organización que tenemos proyectada y en la cual seguirán prestando valiosa cooperación los hermanos Breto y otros miembros directivos.

El gran pitcher Balbino Inojosa, el manager Luis "Chato" Rivera y el receptor Carlos "Catire" Maal, del equipo "Royal Criollos", en el año 1932. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

En el pitching contamos con Inojosa, el famoso serpentinero, dominador de la bola rápida que desarrolla a fantástica velocidad y de quien Paul Richards, el manager del "Macon" dijo que era "un positivo orgullo del béisbol venezolano". Tenemos también a Francisco Hernández que, al comienzo de la pasada temporada, se hallaba un poco débil para resistir el trabajo del box. Hoy, más fuerte y experimentado, después de haber adquirido la necesaria experiencia, ha obtenido buenos triunfos y espera reaparecer este año en condiciones de augurarnos una victoria en la Serie. Francisco Hernández es alto, corre bastante tiene un buen brazo y batea con vigor. En el infield destacaremos los mismos veteranos: Nieves Rendón, considerado el mejor inicialista del país y el jugador más útil a su Club; Manuel Arratia y José Dolores Blanco, que están luchando con entusiasmo para librarse de sus defectos y brillar definitivamente en la temporada; y Luis Jiménez, la figura criolla más destacada en la defensa del campo corto. El trío de out-fielders será más notable que el año pasado, ya que en los jardines presentaremos algunos novatos de los que esperamos buenos resultados.

El pitcher Francisco Hernández, del equipo "Royal Criollos". Año 1930. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

El hitting será uno de los principales temas de la temporada de práctica y todos trataremos de que represente una ayuda para la novena. En este año conservamos el primer lugar en el batting average de los clubs.

Y el rubio Maal, refrenda sus declaraciones con sus escasas pero convincentes sonrisas.

(Publicado en el periódico "El Nuevo Diario", el 5 de enero de 1931).

Miguel Dupouy Gómez.